martes, 13 de noviembre de 2012

Sueños


En plena campaña electoral el paisaje urbano denota las sobras de las que gozan los partidos mayoritarios, y los que tiñen de azul sus promesas incumplidas.

He pensado en el sueño de esas banderas instaladas con tuzudez en balcones y ventanas, resistiendo contra viento y marea.

Un líder mesiánico abriendo sus brazos en gesto estudiado.

¿Depositaran sus sueños en buenas manos?

¿Quién soy yo para negarlos?

No es mi independencia, porque no soy natural de aquí y me siento plenamente aragonesa, pero no puedo dar un voto a favor de quienes descuidan esta razón legítima de autodeterminación y libre albedrío.

Cuantos vinimos a Catalunya para pacer en ella no debemos negarles este sueño.

Voto útil. No dejarlo en descuido.

1 comentario:

Enrique Sabaté dijo...

Estoy contigo en esto y lo digo desde Madrid, tienen todo el derecho a querer ser quienes quieran y llamarse como quieran. Al menos a decidirlo.

Presento mis disculpas por la intromisión.